Alimentos que debes evitar en el embarazo

Durante el embarazo es fundamental mantener una alimentación sana y equilibrada. Una de las pautas esenciales es evitar el consumo de comidas que puedan afectar el desarrollo del bebé y el mantenimiento del buen estado de salud de la madre.

En este artículo se explica los riesgos de consumir algunos alimentos como la cafeína, carne poco cocida, pescado azul grande, alcohol.

Alimentos a evitar en el embarazo

Éstos son algunos de los alimentos que no se recomienda consumir durante el embarazo:

Quesos mohosos

Los quesos azules, como el azul danés, el gorgonzola y el roquefort, y los quesos blancos que muestran moho, como el queso brie, el camembert o el queso de cabra. Este tipo de quesos que son menos ácidos y húmedos, lo que los convierte en un medio de cultivo ideal para materias dañinas como la listeria.

La listeriosis es rara, pero las embarazadas son muchos más vulnerables a estas bacterias. Es muy importante evitar el riesgo de contraerla pues la listeria atraviesa la placenta, llega al feto y puede provocar un aborto espontáneo, muerte fetal, o enfermedades rara en recién nacido.

Las mujeres que siguen una dieta vegana pueden seguir consumiendo las alternativas al queso a base de anacardos que no hayan sido fermentadas o que se hayan pasteurizado.

Cafeína

La cafeína es un estimulante y un diurético. Como estimulante tiende a aumentar la presión de la sangre y el ritmo cardíaco, ambos de estos efectos se deben ser evitados generalmente durante el embarazo. La cafeína tiende a aumentar las frecuencias de la urinación, causando una disminución de los niveles de fluidos corporales resultando en posible deshidratación.

Aunque la embarazada podría ser capaz de procesar su propia ingestión de cafeína, su bebé no tiene la misma capacidad porque su metabolismo está madurando todavía. Aun en cantidades pequeñas pueden cambiar cambios en el patrón de sueño del bebé. Recuerda, la cafeína es un estimulante puede mantenerte despierta a ti y a tu bebé.

Carne poco cocida

La carne cruda o poco cocida es peligrosa en el embarazo debido a los riesgos potenciales de contraer toxoplasmosis, una infección causada por un parásito que se encuentra en la carne y puede producir retraso mental, ceguera y epilepsia en niño.

Toda carne se debe cocinar bien, de manera que no sangre y muestre zonas de color rosado. Es importante la limpieza después de cocinarla, se deben limpiar todas las superficies con las que haya estado en contacto con la carne.

Una alternativa es obtener las proteínas de fuentes vegetales: legumbres, derivados de soja como tofu, seitán, semillas, frutos secos y cereales.

Pescado azul grande

El atún rojo, el pez espada, el cazón, el lucio y la caballa real son especies de pescado grasos que pueden contener una dosis peligrosa de mercurio, un metal pesado tóxico para las neuronas. También pueden contener dioxinas cancerígenas, que son interruptores endocrinos.

Los pescados azules son ricos en los saludables ácidos grasos omega-3 pero las embarazadas tienen que evitarlos. La alternativa para obtener las cantidades que necesitan las pueden encontrar en fuentes vegetales como el aceite y las semillas trituradas de lino, las nueces y las semillas de chía.

Alcohol

Las mujeres embarazadas no deben consumir ni una gota de alcohol durante el embarazo, aumenta el riesgo de aborto y muerte fetal. Una dosis muy pequeña ya puede afectar negativamente al desarrollo cerebral y a la salud de bebé.

El alcohol pasa a través de la placenta y en el cuerpo inmaduro del feto, el alcohol se descompone mucho más lentamente, por lo cual el nivel de alcohol en la sangre de este puede ser más elevado y permanecer así más tiempo que en la sangre de la madre.

El alcohol puede provocar síndrome de alcoholismo fetal, que conlleva deformidades faciales, defectos en el corazón y retraso mental.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *